Penya de l'Athletic Club Bilbo Ondokoak

Es sólo un ejemplo, pero lo que se describe a continuación, refleja el espiritu ZURI-GORRI:

'Invadir' prácticamente un tercio de una grada y buena parte de otra es señal de que la tropa camina en una misma dirección. Como reza la famosa frase acuñada en Liverpool, "nunca caminarás solo". La fe ha invadido tanto a la feligresía que el peregrinar a Valladolid, tierra de devotos y de iglesias mil, fue una movilización de masas que promete repetirse.
Los más de 4.000 aficionados que secundaron al equipo en Pucela patentizaron la fidelidad de una grey cada vez más convencida. Los 29 autobuses fletados por la Peña Etxeberria Okela en colaboración con la Agrupación de Peñas desbordó las previsiones y originó un rugido permanente en Zorrilla. Era un ir y venir constante de hinchas.
La batalla, en ese aspecto, estaba ganada. Incluso los compañeros de una emisora local se lamentaban de lo que veían. "Es una vergüenza para nosotros que nos ganen los bilbaínos en apoyo a sus colores", se lamentaba en una de las cabinas el periodista radiofónico. No se podía hacer ni una idea de las historias vividas durante la masiva toma de Valladolid. Por ejemplo, unos aitites de Mungia exigían a los promotores de la iniciativa que les dieran las entradas que les correspondían a estos para sumarse al viaje.
Otro joven le señaló triste a José Pereda, de 'El Huevo Berria', que sólo disponía de 10 euros, insuficientes para cubrir los 20 que costaba cada entrada. "Toma, te lo pongo yo. Ya me lo devolverás", le regaló Pereda. Al día siguiente, el joven le devolvió la cantidad prestada. Una señora hizo de 'paraguas' de su hijo de 13 años y le hizo saber al centro donde estudia que tenía anginas para que pudiera hacer pira. Otros acompañantes le preguntaron si ya tenían preparado el viaje para la final.
Si en Soria fueron algo más de 2.000 los aficionados que se dieron cita y en Valladolid se incrementó la cifra, la cantidad puede superarse con creces en Viena. En su momento, la aseveración de Lamikiz de que serían 5.000 los hinchas que se desplazasen parecía casi una bilbaínada, pero tiene visos de poder cumplirse.